Cómo Hacer un Plan de Negocios l Componentes Básicos para Lograr Sinergia y Potenciar el Éxito del Proyecto
Ideas de un Plan Integral que Resuma el Porqué y el Cómo Llevar Adelante la Creación de un Negocio
¿Quién Puede Hacer un Plan de Negocios?
Suele decirse que si un plan es bueno y simple, es dos veces bueno. Por más tentador que sea dar mucha información sobre su idea, trate de no dar mas información de la necesaria. No deje que su ego se apodere de usted. Algo común es pensar que cuanto más extenso sea un plan, mas posibilidades de éxito tendrán.
Un plan de negocios no debe ser una plataforma para adornar sus planes, sus capacidades, ni sus virtudes. Si usted no es un especialista en el área de proyectos, no cuenta con una maestría o ni siquiera tiene estudios universitarios, esto no implica que no pueda realizar un plan de negocios. Siempre me gusta ver a la realización de un plan como algo integrador entre distintas disciplinas, donde la suma de las partes logra sinergia. Y donde la voluntad de alcanzar los objetivos, con apertura mental para escuchar propuestas hace que todos tengan posibilidades de éxito.
David Ogilvy fue sin duda uno de los hombres más destacados del marketing y también del Management. Tenía un estilo muy particular para comunicar su mensaje. Usaba lenguaje florido y recursos originales. Un día, por ejemplo, cuando los miembros del directorio fueron a tomar asiento alrededor de la mesa de reuniones, encontraron una muñequita Rusa en el lugar reservado para cada uno.
Era un juego de “mamushkas”. Fueron abriendo ese nido de muñecas, donde cada una encierra otras más pequeñas y al llegar a la más pequeñita encontraron el mensaje que Ogilvy quería trasmitir ese día. Decía así: ”si contratas a personas más pequeñas que tú mismo, nos convertiremos en una compañía de enanos. Si contratas gente más grande que tú, nos convertiremos en una compañía de gigantes.»
“Contraten grandes, gente mejor que ustedes,”exigía Ogilvy. ”Si es necesario, páguenle más de lo que ganan ustedes.”
Es improbable que una persona cuente con todos los conocimientos suficientes para realizar íntegramente un proyecto. Básicamente porque para poder hacer un plan es necesario no sólo dominar el método, sino las cuestiones técnicas relacionadas al mismo.
Hay que entender cuál es la naturaleza que lleva a querer realizar un plan o muchas veces obligar a hacerlo. Si todo surge de una idea, puede suceder que la misma este dotada de conocimientos técnicos sobre lo que se quiere hacer o simplemente se haya detectado una necesidad en el mercado y se quiere trabajar para satisfacerla.
Puede que sea un requerimiento para obtener un crédito o también un conjunto entre una persona o grupo de personas que tienen una idea o quieren copiar algo y se juntan con técnicos que cuentan con el valor capital del conocimiento para realizarlo técnicamente.
Tomemos por caso el de una persona que luego de trabajar muchos años en una empresa de venta de cerámicos para pisos, detecta que no existe en el mercado ningún producto que sirva para recubrir al mismo y darle brillo duradero, o si bien existen no son lo suficientemente eficientes como para lograr el resultado esperado.
Esta persona cuenta con la experiencia y conoce la necesidad. A la vez conoce el producto sobre el que se aplicaría el nuevo, porque lo vende hace años. También recibe constantemente preguntas de los clientes sobre este tipo de soluciones para las que no encuentra respuestas.
Ahora bien, si esta persona quiere avanzar sobre transformar esta idea en algo concreto tiene dos problemas. Primero que no cuenta con conocimientos sobre el armado de un plan de negocios y segundo no tiene conocimientos técnicos sobre cómo poder fabricar el producto. Digamos que sin cumplir estos dos requisitos en conjunto es difícil poder realizarlo. Esto es lo natural y la principal causa de muerte de las ideas, muchas de las cuales son grandes genialidades.
Supongamos que este individuo compra este libro u otro donde le define los 10 pasos para realizar un plan de negocios, ¿es esto suficiente para poder realizarlo?… mi respuesta y principal motivación para este trabajo es que no.
Al no existir una certificación para determinar que es o no es un proyecto. La realidad nos dice que un proyecto es todo aquello que resume el porqué y el cómo poder llevar adelante la idea. De todos modos ya ampliaremos este tema mas adelante.
Siguiendo con el caso, el problema de esta persona tiene solución. Por un lado deberá invertir tiempo y posiblemente dinero en lograr asesoramiento técnico para cada punto. Sin duda depende del proyecto el foco de atención, así existirán proyectos donde lo mas complejo es lograr el producto técnicamente y otros donde el problema se basa más en un análisis fundamental sobre si el negocios es posible de llevarse a cabo.
Como veremos más adelante no existe un solo componente que asegure el éxito. Lo que hace solido un plan es la integridad entre todas las partes.
Desde mi punto de vista es fundamental que el director del proyecto participe en todas las etapas y si es posible trabajar en equipo. Lo considero determinante para poder tomar real dimensión de las necesidades y no dejarlo al azar.
Un Plan de negocios puede ser como un gran diploma universitario. Es muy importante pero solo para llenar un marco y colgarlo de una pared. Es decir, es tu carta de presentación pero no te asegura la estadía. Al fin y al cabo, el titulo y la reputación de la universidad, son algo secundario. Lo importante es que puedas realizar tu tarea. Un plan puede de igual manera transformarse en una muy linda presentación de lo que piensas que puede suceder. Pero rara vez esto guarda algo de correlación con lo que realmente ocurre en la realidad.
Lo que determinará que logres tus objetivos no es ni más ni menos que, el trabajo arduo, la dedicación, tu actitud y sobre todo la metodología con que lleves adelante la idea madre de tu negocio. Lo demás es secundario.
Hasta aquí he obviado algo que creo fundamental aclarar. Un plan de negocios no solo sirve para proyectos con fines de lucro. De hecho lo creo indispensable en todo tipo de proyectos, ya sean privados, públicos, con o sin fines de lucro. Quién puede discutir que si nos disponemos a realizar un proyecto donde contemplamos satisfacer una necesidad primaria de la sociedad, esto no justifique la realización de un profundo análisis. Lo que está en riesgo en este caso no es la rentabilidad de un inversor, sino la vida de las personas.
Organizaciones como Green Pace tienen más que claro lo necesario de contar con proyectos bien realizados. Ni hablar de instituciones como médicos sin fronteras o Caritas, solo por nombrar algunos. Los componentes son básicamente los mismos sin importar el objetivo final.
Repasando un poco los componentes básicos:
• Descripción de la historia, definición de la idea y objetivos
• Definición clara del mercado y sus perspectivas, clientes, competidores, proveedores, etc.
• Descripción de la empresa y cuál va a ser la organización que necesitará para afrontar el proyecto.
• Explicación de cómo el negocio logrará ventajas competitivas y atractivas para los clientes.
• Identificación y estimación de situación a futuro que puedan afectar el normal funcionamiento del proyecto.
• Armado de la información económica y financiera necesaria para evaluar el proyecto.
• Análisis de las fuentes de financiamiento y las exigencias de los mismos.
• Costos de oportunidad
• Análisis de riesgos
• Conclusiones y resumen Ejecutivo
Un día un profesor preguntó a todos los alumnos ¿Cuál es el fin último de toda organización? La mayoría de las respuestas se relacionaban con la obtención de un beneficio económico, lograr posicionamiento en la mente del consumidor, crecer, expandirse, etc. La respuesta que dió fue para mi contundente y clara. Dijo:
“Toda organización tiene como fin último la satisfacción de una necesidad, sea esta obtener dinero o alimentar a niños huérfanos en África. Si no pueden lograrlo no tendrán ningún tipo de futuro.»
[1] Tomado del articulo de la revista mercado julio 2009
[2] Guillermo Spitnagel